Se han publicado los resultados del célebre informe PISA sobre educación, un estudio internacional que se realiza cada tres años. El PISA lo lleva a cabo la OCDE (que es la organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos), y sus siglas significan Program for International Student Assessment (y no informe «trepitja», traducción al catalán de «pisa», como dijo hace unos días la ‘consellera’ Camps -sí, la ‘consellera’, la responsable de educación- en Baleares…) Leer para creer.
La evaluación de la OCDE comprende una serie de pruebas estandarizadas realizadas a más de 500.000 estudiantes de 15 años de más de 60 países diferentes. Las pruebas miden los conocimientos de los alumnos en matemáticas, ciencias y comprensión lectora. Este año el énfasis se ha puesto en esta primera disciplina.
En el ránking han arrasado los países asiáticos. Finlandia, la campeona en las últimas ediciones, ha caído del primer puesto y España sigue estancada en la mitad de la lista, pero ha retrocedido en el que era su aspecto más positivo: la equidad en la educación, que empieza a notar a nivel oficial las consecuencias de las recortes en la educación pública. Ver informe/España.
El PISA es un informe que proporciona diversos enfoques en los medios. Veamos algunos titulares:
LA VANGUARDIA: España no alcanza la media en el informe PISA y Catalunya se mantiene «Asia arrasa en el informe de la OCDE sobre los conocimientos de alumnos de 15 años en matemáticas, ciencias y comprensión lectora | España ocupa la posición 33 de 65 y Catalunya la séptima entre las comunidades autónomas»
Como suele ser habitual, los políticos han reaccionado al informe sin asumir su responsabilidad o culpando a “los otros”. En el caso catalán, la responsable de Educación, Irene Rigau, se ha quedado tanto ancha al atribuir los peores resultados de Catalunya en el informe PISA «a la inmigración» (ver noticia). Por su parte, el Gobierno español «defiende que el informe Pisa avala el nuevo modelo de la ‘ley Wert'» (ver noticia). Una ley que ha sido tildada por mucha gente muy cualificada como de elitista o bomba para la educación pública, pero que según la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, va a garantizar «que todos los españoles puedan tener un nivel educativo que les permita disfrutar de las mismas oportunidades»
Afortunadamente, en EL PAIS de hoy se publica un artículo de Andreas Schleicher, subdirector de la OCDE para temas educativos y uno de los responsables de este informe.
El artículo íntegro ‘Afrontar el bajo rendimiento educativo’ puede leerse aquí, pero he seleccionado algunos párrafos bastante interesantes:
“A diferencia de lo que algunos apuntan, el rendimiento del estudiante en España no ha empeorado, pero tampoco ha mejorado desde que PISA se puso en marcha hace más de una década, a pesar de los aumentos significativos en inversión educativa”.
“Hemos centrado la evaluación PISA de este año en las matemáticas (…) el hecho de tener una competencia matemática deficiente sigue limitando gravemente el acceso a los puestos de trabajo mejor remunerados y más gratificantes”.
“Elevar la excelencia y mejorar la equidad no son objetivos políticos contradictorios”.
“De hecho, la variación en el rendimiento de los estudiantes españoles entre regiones es solo del 2 % —mucho menos que en la mayoría de otros países— y las diferencias entre regiones se explican principalmente por factores socioeconómicos”.
“España no va a tener mejores resultados educativos hasta que la mayoría de los profesores y escuelas en gran parte de las regiones afronten el bajo rendimiento educativo. Hay que señalar también que no se trata solo de un reto para niños pobres de barrios pobres, sino para muchos niños procedentes de muchos barrios”.
“PISA ha revelado un número alentador de características que comparten los sistemas escolares con más éxito del mundo. Estos incluyen dar a las escuelas autonomía para que puedan tener más libertad en la toma de decisiones acerca de los planes de estudio y cómo invertir los recursos; y, a su vez, hacerles más responsables de los resultados.(…). Algunos de los retos tienen que ver con la forma en que los maestros enseñan y cómo aprenden los estudiantes. Por ejemplo, los estudiantes españoles obtienen mejores resultados en tareas de opción múltiple (…) que en tareas que les requieren extrapolar lo que saben y aplicar sus conocimientos de forma creativa. Esto es importante porque el mundo moderno no premia tan solo por lo que sabe, sino por lo que se es capaz de hacer con ello».
“Existe un acuerdo generalizado sobre la importancia de la educación. Pero la verdadera prueba surge cuando la educación se compara con otras prioridades. ¿De qué manera se remunera al profesorado en contraste con otros profesionales altamente cualificados? ¿Preferirías que tu hijo escogiera la profesión docente en vez de la abogacía?”.
“La otra es la creencia en las posibilidades con las que cuentan los estudiantes. En Japón, por ejemplo, los estudiantes no solo piensan que tienen control sobre su capacidad para lograr el éxito, sino que están preparados para hacer cualquier cosa para conseguirlo: el 84% dijo que no evitaban resolver problemas que entrañaran una cierta dificultad. En cambio, en España solo la mitad de ellos compartían esta opinión”.
“Estos sistemas educativos de calidad ponen especial atención en la selección y formación de su profesorado. (…) Les proporcionan un entorno propicio para el trabajo colaborativo, de manera que sean capaces de llevar a cabo buenas prácticas. Y cuando tienen que tomar decisiones sobre inversión, priorizan la calidad del profesorado sobre el número de alumnos por clase”.
“En los sistemas educativos más burocráticos, se abandona a los docentes a su suerte y se les sobrecarga de normas y reglamentos sobre cómo enseñar”.
“Los mejores sistemas escolares se centran en resultados, pasando de una educación centrada en la burocracia a una que mira al profesor, a la escuela, creando redes para la innovación. Y por último, pero no por ello menos importante, los (mejores) sistemas tienden a alinear la política (…) hasta que constatan que se ha implementado de manera consistente”.